Él os plantea una parábola tomada de vuestra propia vida: ¿[Aceptaríais] tomar a algunos de esos que poseen vuestras diestras como socios [de pleno derecho] en lo que os hemos dado como sustento, de forma que vosotros [y ellos] tuvierais partes iguales en ello, y tuvierais miedo de [hacer uso de ello sin consultarles a] ellos, como teméis a [los más poderosos de entre] vuestros iguales?"Así de claro exponemos estos mensajes para una gente que hace uso de la razón.