El Profeta tiene mayor derecho sobre los creyentes que ellos sobre sí mismos, [por ser como un padre para ellos] y sus esposas son sus madres: y quienes están [de este modo] ligados entre sí tienen mayor derecho unos sobre los otros, conforme al decreto de Dios, que [aun el que existía entre] los creyentes [de Yazrib] y los que habían emigrado [allí por Dios]. No obstante, debéis obrar también con suma bondad hacia vuestros [demás] amigos: esto [también] está escrito en el decreto de Dios.